«No hay emociones buena ni malas, todas son necesarias para nuestro crecimiento personal», sostiene

«Tenemos que querernos bien, que es lo contrario al egoísmo: Sólo así podremos dar lo mejor de nosotros mismos»

 

Por segundo año consecutivo, la psicóloga fontanesa Isabel Chaves Sayago participa en el proyecto educativo que, sobre inteligencia emocional, organiza la AMPA del Colegio “Miguel Garrayo” de Fuente del Maestre , bajo el patrocinio de la Consejería de Educación y Empleo de la Junta de Extremadura. En esta ocasión, además, le acompaña la musicoterapeuta Jenni Sánchez Ramos.

Isa Chaves hace un balance positivo de la primera fase del proyecto, desarrollada durante el curso 2017/18: “ Poner nombre a lo que nos pasa para explicarnos a nosotros mismos. Ése era el objetivo: detectar y nombrar , etiquetar nuestras emociones para aprender a gestionarlas de forma correcta.  Algo que conseguimos, porque no hay emociones buenas ni malas, todas son necesarias para nuestro crecimiento personal”.

“Al final del curso, hubo una sesión conjunta muy emotiva, en la que la gente se abrió y se compartieron muchas vivencias enriquecedoras. Una de las grandes claves del éxito de este proyecto es el haber formado piña, un espacio de convivencia y confianza muy valioso. Y cuando se da eso, las personas que participan se se entregan, se comparte todo y ésa es la esencia del verdadero aprendizaje, que es muy vivencial”.

En el citado proyecto, se contemplan sesiones por separado con los padres y los alumnos, y sesiones conjuntas con ambos. Otro objetivo primordial es el de  mejorar las relaciones parentales: “ Uno de los problemas principales que se detectan en las relaciones entre padres e hijos es que los padres, en un afán de sobreprotección,  evitan hablar con sus hijos de emociones negativas para que no sufran. Y así no empatizan nunca con ellos, ni nunca se dará una buena comunicación. Al contrario, ellos actuarán igual, y los padres tampoco detectarán cuando a ellos les pase algo negativo. Reprimir el llanto, por ejemplo, no es el camino. Eso hay que gestionarlo, no evadirlo”.

Chaves Sayago se muestra muy crítica con cierta corriente de pensamiento actual, en la que “casi se obliga al individuo a estar permanentemente contento”:  “Es una moda muy dañina, y muy comercial, resulta rentable hablar de felicidad sin mostrar todos sus aspectos.   Como si la tristeza o la melancolía no sirviesen para ser más felices… ¡ Pero si emociones como el miedo o la tristeza nos impulsan a cambiar aquellas cosas de nuestras vidas que no nos gustan !. El miedo, que tiene tanta mala prensa, es lo que nos ha permitido sobrevivir como especie. Fíjate que el miedo es tan poderoso que el sistema lo utiliza, a través de los medios, para controlarnos, para que nadie se salga de la raya. El miedo o la tristeza también forman parte de la felicidad”.

A lo largo de este curso, también se trabajará la autoestima y la autoconfianza: “Tenemos que aprender a dejar de vivir en el miedo.  Cambiar el concepto de culpabilidad por responsabilidad. Así desarrollaremos un buen grado de confianza primero en nosotros mismos, para convertirnos en referentes positivos para los hijos. Y tenemos que cuidarnos mucho, y querernos muy bien, que es lo contrario al egoísmo: Sólo así podremos dar lo mejor de nosotros mismos, nuestra mejor versión”.

“A final lo que cuenta es sentir, poner el corazón es esencial para crear y crecer. Se puede tener una inteligencia académica brillante, pero si no pones corazón, no te llevará a buen puerto. “